LA
MARIQUITA (Coccinellidae) EN LA STEVIA.
Las mariquitas son insectos de la familia
de los coleópteros (escarabajos), en concreto su familia es la de los
coccinélidos. Tenemos que hay un total de 4.000 especies en esa familia, con una
variabilidad de con o sin lunares y colores considerables.
Los coccinélidos (Coccinellidae) son una familia de insectos coleópteros de la superfamilia Cucujoidea. Reciben
diferentes nombres vulgares según el lugar, siendo el más común mariquita, en nuestro país se le llama así.
Tienen el cuerpo redondeado y con frecuencia colores vivos. Muchas especies se
alimentan de pulgones, por lo que contribuyen a controlar estas plagas.
Su nombre común varía según la especie y
el país. Los más habituales son: mariquita, catita, vaquita de San Antonio y
vaquita de San Antón en Argentina; mariquita, chinita en Chile; mariquita en
España, Puerto Rico, República Dominicana, Ecuador, El Salvador, Colombia,
Venezuela, Bolivia, Perú, Paraguay, Honduras, Costa Rica y Nicaragua;
sarantontón o sanantonito en las Islas Canarias; catarina en México, San
Antonio en Uruguay, y por último tortolita en Guatemala.
Cuando tengas en tus manos una mariquita, seguramente vas a recordar el cosquilleo de sus patas y el
tacto de su “caparazón”. Y lo pongo entre comillas porque en realidad ese
caparazón no es más que un par de gruesas alas especializadas (élitros) para
tapar las alas verdaderas que permiten volar al insecto. Primer mito roto sobre
las mariquitas…
Para la Stevia, es un aliado maravilloso, ya que son auténticos depredadores de pulgones, hasta tal punto que, llegan a no poner huevos, si no tienen asegurada la presencia de pulgones en la zona. El hecho es que, desgraciadamente, cada vez es más difícil encontrarse con mariquitas en el entorno rura, gracias a dios que en nuestro caso no es asíl, ya que no utilizamos los agroquímicos, utilizados (sobre todo en monocultivos) que sabemos, les afectan directamente.
Para la Stevia, es un aliado maravilloso, ya que son auténticos depredadores de pulgones, hasta tal punto que, llegan a no poner huevos, si no tienen asegurada la presencia de pulgones en la zona. El hecho es que, desgraciadamente, cada vez es más difícil encontrarse con mariquitas en el entorno rura, gracias a dios que en nuestro caso no es asíl, ya que no utilizamos los agroquímicos, utilizados (sobre todo en monocultivos) que sabemos, les afectan directamente.
Pero si tenemos la suerte de contar con la
presencia de mariquitas en nuestra Stevia, podemos contar con que su dieta nos
va a beneficiar enormemente, ya que estas se alimentan de pulgones tanto en su
estadio larvario como en el adulto. Un dato interesante es que un único
ejemplar de mariquita puede llegar a comer hasta 5.000 pulgones en su vida.
Los colores vivos de las mariquitas,
responden a la estrategia de advertencia hacia sus depredadores, los cuales
relacionan los colores vivos a veneno. Incluso alguna especie de mariquita es
venenosa, pero tranquilos, podrías comer un buen puñado de ellas sin que te
afectara lo más mínimo.
En nuestro cultivo de Stevia es sembrado y
mantenido de forma ecológica, se respetar los mecanismos de la
naturaleza (Siembra Directa)... Debemos entender, que hay tres tipos de insectos que son deseables: los depredadores, los
parasitoides y los polinizadores.
Hemos leído, que las mariquitas adultas necesitan alrededor de 500
pulgones para tener energía para poner sus primeros huevos. También las larvas
necesitan mucha energía para convertirse en pupa (paso previo a adultas), en
torno a los 350 pulgones. Es interesante identificar también la larva de la
mariquita, por si la vemos en nuestro huerto, y no pensar que son insectos no beneficiosos.
La siguiente imagen muestra el aspecto que presenta la larva de la mariquita.
Las mariquitas, ponen los huevos de color amarillo uno por
uno o colocados en grupos sobre las hojas o tallos, generalmente en la cercanía
de colonias de pulgones. Después de una semana, emergen las larvas que tienen
seis patas, y gran movilidad. Algunas son espinosas o verrugosas, de color
negro con minúsculas manchas blancas o anaranjadas, aunque hay una gran
variedad en los colores según la especie.
Estas larvas pasan por cuatro estadios
antes de convertirse en pupas. Las pupas se adhieren a las hojas, tallos o
rocas, y suelen ser de color anaranjado y negro. Pueden confundirse con
excrementos de aves. De la pupa emerge un adulto de color amarillento sin tener
aún definidos los colores característicos del adulto; pero los mismos aparecen
en unas pocas horas.
Una buena forma de atraer mariquitas en el
cultivo, es disponiendo del “postre” de su dieta: el polen. Si bien las mariquitas
se alimentan en gran medida de pulgones, el polen forma parte de su dieta,
siendo sus preferidas plantas como el hinojo, cilantro, zanahoria (en
flor), y otros cultivo que produzcan flores pequeñas. Así que, intentar disponer de estas plantas
por el cultivo, sería una buena forma de atraer mariquitas.
Cuando observe este pequeño insecto en su plantación, siéntase bendecido por tener un PLAGICIDA o controlador de plagas, NATURAL y extremadamente beneficioso para su cultivo.
RASD 2017.
Cuando observe este pequeño insecto en su plantación, siéntase bendecido por tener un PLAGICIDA o controlador de plagas, NATURAL y extremadamente beneficioso para su cultivo.
Foto en nuestra plantación. (2017).
RASD 2017.